¡Oh, el mundo gira!
DISCURS.O.S. por Melguencio Melchavas
Número 15
14-05-99
No lo sé pero lo desconozco
Existe una corriente entre los humanos que nos hace
menos humanos, por lo irracional: nos atraen las explicaciones inverosímiles
a lo desconocido. Así, cuando oímos hablar de ocultismo se nos abren las
orejas más que si nos nombran la última revelación científica, y la alquimia
nos interesa más que la química, la magia más que la medicina, y las sociedades
secretas más que las asociaciones culturales. Del mismo modo, preferimos
creer que después de muertos seguiremos vivos -gran contradicción-, y estamos
encantados si nos revelan que podemos hablar con los difuntos mediante
el espiritismo, aunque normalmente no saludemos ni al vecino de enfrente;
y la fotografía espiritista y las psicofonías son nuestras favoritas antes
que la fotografía creativa o las sinfonías. Si nos hablan de ciencia, que
sea para camelarnos con viajes en el tiempo a través de agujeros negros
-yo prefiero no convertirme en tortilla-, o de mamuts congelados que parece
que se mueven. Mire usted, yo soy muy serio y me gusta la antropología,
quizás reponga el lector. Sí, la que explica el origen de la inteligencia
humana con visitas extraterrestres. Qué estúpidos tendrían que ser esos
marcianillos, si estamos hechos a su imagen y semejanza. Ahora, eso sí,
muchas profecías se cumplen. Siempre lo descubrimos cuando ha sucedido
lo profetizado. Como el horóscopo. Qué fantástica base de partida: los
nacidos cuando el cielo hace cierto dibujo son todos iguales. Gran método
de sustento de adivinos, magos, zahoríes y demás fauna turulata. ¿Y qué
me dicen de la telepatía? Invento donde los haya, que permite comunicarse
a las gentes sin necesidad de teléfono móvil. Apasionante también la historia,
sobre todo cuando se viste de leyenda, como Anastasia (ya no, que se han
encontrado sus huesos), Rasputín (aunque hoy le superan casi todos los
dirigentes políticos), o el Conde Drácula (otro santo). Por que, ¿para
qué sirve el estudio de la historia verdadera? Total, la repetimos sin
cesar... Pero les dejo, que tengo que ver el informativo en televisión
mientras me bebo unos cuantos litros de alcohol. Quizás mediante esa combinación
logre alcanzar el conocimiento.
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