Ángel custodio
La tradición cristiana de los ángeles de la guarda personales tiene su traslación colectiva en la figura del ángel custodio de las poblaciones: "Cada pueblo tiene asignado un ángel custodio" (Daniel 10,13.20).
Este trasunto del Golem es un ser celestial municipal que protege a toda la comunidad de catástrofes, epidemias y guerras.