Declaraciones de autores y otros profesionales que han pasado por la Editorial Bruguera
Las entrevistas de Amaníaco: By Vázquez
Por J. Coll y J. Cañisá
Fanzine Amaníaco, 1993
En esta ocasión los AMANÍACOS entrevistamos a Manuel Vázquez, uno de los autores más singulares dentro del cómic humorístico en este país.
Nacido en Madrid, en 1934, vino a Barcelona con 18 años sobre el papel, y 14 de edad real. Trabajó en todas las revistas que se hicieron en la época de Bruguera. Estuvo también en EL PAPUS, y actualmente dibuja para MAKOKI, y realiza colaboraciones con el diario EL OBSERVADOR, donde publica tiras de tema político.
Y a continuación, esta es la entrevista que nos concedió Manuel Vázquez, que se define como un dibujante bohemio, y que ya ni recuerda la de personajes que ha llegado a crear, aunque nos dice que el primero fue un diablillo muy malo, que se llamaba Azufrito.
P. Aunque te defines como dibujante humorista... ¿que fue lo que te llevó a entrar en el mundillo del cómic?
R. Eso me digo yo, qué coño fue..., pues no sé, afición, siempre me ha gustado, pero vamos, soy humorista en primer lugar, me da lo mismo eso, que teatro, lo que sea.
P. ¿Nunca has hecho cómic realista?
R. Nooo, nunca, siempre humorístico.
P. Creo que empezaste a dibujar a la edad de los 14 años...
R. Empecé a los nueve, profesionalmente sí, el primer dibujo que entregué y cobré.
P. ¿Dónde fue?
R. En el "Flechas y Pelayos", una revista como puedes comprender..., del puro régimen.
P. ¿Qué influencias has recibido, qué autores te han influenciado?
R. Pues como todos, copiando de aquí y de allí hasta tener un estilo propio, pero casi siempre de dibujantes de Argentina, entonces venían muchos cómics argentinos.
P. Vamos a entrar ahora en la época que estuviste en Bruguera - ¡Ah! ¿es que
ha habido otra? - nos comenta riendo.
P. Bueno, mientras estuviste en Bruguera, creaste personajes como Anacleto, agente secreto, la abuelita Paz, que fueron los que te dieron más fama...
R. ¿Qué fama...?, popularidad y nada más.
P. Ya, pero también hay otros personajes como Angel Siseñor, La familia Cebolleta, Las Hermanas Gilda, etcétera, etcétera...
R. Buf... y cincuenta años de etcétera.
P. ¿Qué opinión te merecen hoy en día estos personajes...?
R. Repugnantes, menos el Tío Vázquez, que soy yo, que siempre he procurado que sea yo. Verdaderamente, como estaban creados por épocas y por censuras...
P. En el caso de las Hermanas Gilda...
R. Gilipollas completamente.
P. Pero creo que fue allá por el 55 cuando la famosa Ley de la Censura, que fue cuando más se metieron...
R. Siempre, cuando no era por la censura propia, la censura gubernamental, la censura de la censura y..., horrible, era horrible, personajes falsos completamente.
P. En 1967, creas Anacleto, agente secreto. ¿Pretendía imitar a 007?
R. No, no, era uno de la tele, cómo se llamaba... (aquí Vázquez y los miembros de Amaniaco intentamos recordar la serie de TV, y que finalmente recordamos, se trataba de "E1 Superagente 86") que era medio tonto.
P. Más personajes tuyos, La abuelita Paz...
R. Y es falso totalmente. La abuelita Paz estaba diseñada pera hacer el daño a su alrededor. Pero no, todos los personajes que yo creaba, y que luego resultaba que podían tener problemas con la censura..., el campo. Todos terminaban por ir al campo.
P. ¿Y volviendo a las hermanas Gilda?
R. Las hermanas Gilda era la eterna lucha por el novio. Una le quitaba el novio a la otra, y como no se podía salir de noche y tal, pues al campo.
P. ¿La familia Churumbel?
R. Por racismo, también la acabaron prohibiendo.
P. ¿Don Polillo?
R. Don Polillo era muy tonto, a mi no me gustaba.
P. ¿Feliciano, el de la suerte?
R. Ése era bueno.
En esa época, nos comenta, se dibujaban de 20 a 30 historietas a la semana, de ahí la poca calidad de alguna de ellas.
P. Hemos oído que comentaste que los personajes que creaste en Bruguera en sí eran buenos, que las ideas que tenías para ellos eran buenas, pero que el editorial no te permitía llevarlas a cabo.
R. Por eso te digo que son repugnantes.
P. ¿Y no has tenido luego ganas de tomarlos con libertad?
R. Pero como están secuestrados por los... editores
P. ¿Todavía lo están...?
R. In secula seculorum, son propiedad y no los puedo estorbar. El único que es mío es el Tío Vázquez, y Angelito, que es Gu-Gu, que lo patenté a tiempo, que tampoco me interesa, pero solamente por joder, porque también es repugnante.
P. ¿Y la época en que colaboraste para EL PAPUS?
R. Aquello era bonito.
P. ¿Te marcaban alguna directiva?
R. Totalmente libre, igual que ahora en MAKOKI, eres totalmente libre, y por lo menos tú disfrutas. Pero mi época en Bruguera fue la de las plantaciones de algodón, se vivía bien, pagaban, pero explotaban.
P. E1 seudónimo de SAPPO, que utilizabas por aquel entonces, ¿estaba motivado por que ya tenías contrato con Bruguera?
R. ¿Tenéis vista? Pues entonces guardad la pregunta - nos dice riendo mientras bromea - sí, no quería mezclar yo mi nombre, en absoluto, quería ser libre, quería ser yo, y ya está, simplemente. Y caso curioso, luego me di cuenta que al ponerlo con dos "P", era un personaje de SEGAR, hay un personaje que se llama Sappo.
P. ¿Observaste algún cambio en la línea del cómic de humor que se hacía en BRUGUERA?
R. Ninguno. Simplemente son los mismos que todavía están publicando cosas del año de la pera, cosas mías y de los demás, por aquello de no pagar y de aprovechar. Pero, ¿cambio?, ninguno.
Comenta también que cosas antiguas, que ya aparecieron en la época de Bruguera, aparecen ahora publicadas por Ediciones B, y el día que ésta desaparezca, y compre los fondos otra editorial, pues seguirá publicando el mismo material para aprovechar. El secreto está en aprovechar el material. Ahora claro, como lo sacan a la venta y no se vende porque la gente ya lo ha leído, y es malo, y está desfasado, pues entonces dicen: "CRISIS EDITORIAL".
P. En Bruguera hubo una época con Peñarroya, Cifre, Conti... y luego otra época a la que se ha llamado escuela Bruguera, y en la que otros dibujantes se veían obligados a imitar tu estilo. ¿Se podría decir que eras una de las piedras angulares en Bruguera?
R. Hubo épocas, también hubo la época Conti, pero yo pasaba de todo. E1 humor tienes que sentirlo, y en Bruguera con tantas censuras y puñetas, y rellenar tanto las viñetas, con tantas cositas...
P. O sea que definirías tu estilo como simple.
R. Sí, el humor ha de ser simple, con cuatro rayas basta. Ahora, hay que dibujar mucho para hacer cuatro rayas.
Vázquez, by Vázquez
P. Y ya que hablamos del tema, ¿qué técnica utilizas para dibujar, qué materiales...?
R. Me gustaría saberlo, de todo, lo que pillo. Rotulador, pluma, un pincel roto, lo que sale. Las plumillas no son buenas, no hay..., se rompen..., desaparecerán. Los rotuladores y el rotrinq lo han perdido todo, pero también es igual, la gente no lo sabe apreciar.
Acerca de la historieta, una historieta debe tener gracia y humor, y una cosa asequible al público nuestro. Y claro, pasa que trabajas diciéndote que esto lo podrás vender luego fuera.
La historieta debe tener un guión. Argumento, nudo y desenlace, desde luego. A la hora de evaluar el porcentaje de relación entre dibujo/guión nos comenta que trabaja con guiones propios, que no sabría destacar uno u otro, ya que hay historietas muy bien dibujadas, pero con un guión muy pobre, y al revés, historietas con un dibujo muy flojo, pero con un buen guión. Ahora bien, considera que el guión es lo más importante, y que la relación entre el guionista y el dibujante ha de ser como en un matrimonio.
Con el fin de Bruguera, retoma a Angelito para el GARIBOLO, que no pasó a ser más que una continuación de Bruguera (al fin y al cabo, la cosa funcionaba igual, y estaban los mismos). Pero según nos cuenta, entre estas dos épocas, aún hay otra publicación... JAUJA.
P. En 1987, creas Tita & Nick, ¿lo consideras como una continuación de Bruguera o una cosa aparte...?
R. Una cosa aparte, como para resucitar un poco al Anacleto, pero fue una cosa aparte.
P. En el 88 entras en el TBO, con Víctor Mora, en la sección "El rollo del día"...
R. Calla, calla, horrible.
En 1989, cuando entra a publicar en MAKOKI, sin ningún tipo de limitaciones, ni imposiciones, es la época más feliz de su vida, y donde trabaja más a gusto.
En MAKOKI, editan el álbum "Historias Verdes", que es una recopilación de historias antiguas, algunas de las cuales habían aparecido en El Papus. Y en proyecto, está "Sábado Sabadete", que es la recopilación de las historias que ha publicado en MAKOKI.
P. En la colección TOPE GUAI, allá por el 89, aparecen dos álbumes:
"VÁMONOS AL BINGO" y "LOS CASOS DEL INSPECTOR YES".
R. Pues uno aún no los he cobrado, se perdió la liquidación, pequeñas venganzas, y es que cuando empecé en EDICIONES B, yo ya estaba en MAKOKI, y eso sentó fatal. Decían que dibujaba deprisa, y aún iba a resultar que al cabo de los años no sabía dibujar..., ese mismo mes, gané el Premio del Salón, y entonces los envié a tomar por... e hice un mecherito famoso.
P. Cuando consigues el Gran Premio del Salón del Cómic, en 1990, ¿te lo esperabas?
R. Sinceramente, no, no me lo esperaba. Que me lo merezco, sí, de muchos años, de sobra, pero ganarlo, no, y en parte se lo debo a dos grandes amigos míos: Vidal y Santamaría.
P. Se dice que el moroso de 13 Rue del Percebe eres tú, ¿es cierto?
R. No, no, y puedo decirlo por una sencilla razón, 13 Rue del Percebe es mío, y la idea de Mortadelo y Filemón es mía, la idea, pero la creación es totalmente de Ibáñez, yo solamente apunté que podía ser una pareja de detectives, y que uno se pudiera disfrazar.
P. En "Los Profesionales" de Giménez, es donde vuelves a aparecer...
R. Sí, en alguna de esas historias completamente falsas.
P. Aquí es donde queríamos llegar, todas estas anécdotas de Vázquez, Vázquez el moroso... ¿son ciertas?
R. Dos o tres sí, y en el resto, yo mismo me encargaba de contar mentiras.
P. ¿Y la historia que inventaste diciendo que había muerto tu padre para poder cobrar antes?
R. Es cierta. Y allí fue donde empezó la leyenda. La leyenda de Vázquez.
P. ¿Y los cuentos del Tío Vázquez?
R. En Cuentos del Tío Vázquez, si os habéis leído lo de Makoki, muchas de las cosas de "Sábado, sabadete" son auténticas.
P. ¿Y la anécdota en que se dice que pintaste sólo las tiras superiores de las páginas para que te pagaran?
R. Es cierta a medias. Lo cierto es que tenía que venir urgentemente porque me echaban del hotel en Madrid. Y el tipo del hotel, tenía que llamar aquí, al director, que le dijo que mirara que tuviera todas las páginas. Pero yo lo calculé de manera que tuviera el tiempo justo, justo. Entonces yo solo dibujé las puntitas de arriba, y ya está. Y cuando éste las miró parecía que estaban terminadas, y así me pagaron. Pero cuando llegué a Barcelona, las terminé. Además tuvo mucha gracia, y me felicitaron en Bruguera y todo, por la idea tan ingeniosa que tuve.
P. Aparte de que muchos pintan la situación actual del cómic como desastrosa, ¿le ves todavía algún futuro?
R. No sé, yo creo que mientras exista un lector puede ser. Ahora está muy jodido, hay muchas cosas, por los gastos de impresión, precios, porque el vídeo y la TV lo han matado mucho. Pero algo debe quedar. Lo que pasa también es que hay mucha basura. Hay publicaciones que ¿qué tienen de calidad?. Te coges publicaciones antiguas, de hace 20 años, tenías 60 pags., casi todo era bueno. Ahora, todo de relleno. Esto sale muy caro, pues a poner material extranjero, material publicado otra vez, y el público no es tonto.
Yo creo que se debería hacer ediciones más cortas y más caras. Con más calidad. Pero, tampoco hay dibujantes.
Y hasta aquí la entrevista que tuvimos con Vázquez, entrevista en la que nos confesó que los fanzines son una cosa admirable, y que terminamos en un bar y en donde, por cierto..., invitó él, para que luego le vayan dando la fama que le dan.
Gracias por todo, pero la próxima vez te invitamos nosotros.
Ver también
Entrevista a Manuel Vázquez en El País
Manuel Vázquez, el caradura genial