Las contradicciones de don Luis
Filmes de Buñuel comentados
Por Antonio Tausiet
El bruto (1952)
Variación mexicana del mito del Golem (sobre una idea original de Luis Alcoriza), que en manos de Buñuel se convierte en un drama político y edípico sobre un gigantón (Pedro Armendáriz) al que su padre (Andrés Soler, el hermano vago de El gran calavera) utiliza para amedrentar a los inquilinos de una casa que no quieren abandonar. Sergio Cabrera retomó este leitmotiv social en su película La estrategia del caracol (1993).
El Golem (1920), foto de rodaje de El bruto con asistente
(Ignacio Villarreal/Golem junto a un Buñuel/Rabino Low)
y cartel del filme de 1993 de Sergio Cabrera
La sensual esposa del patrón, Paloma (Katy Jurado) se siente atraída por Pedro, el bruto y se hace su amante. A su vez, éste se enamora de Meche, una inocente joven que, como Pedro, comparte su nombre con los de los protagonistas de Los olvidados, de la que ésta podría ser una continuación adulta. La escena en la que el patrón intenta contratar al bruto se desarrolla en un matadero: por todas partes aparecen piezas de carne, como los carnuzos o los putrefactos que poblaban los poemas y los cuadros de los compañeros de Buñuel en la Residencia de Estudiantes de Madrid. Don Andrés se ve interrumpido constantemente, hasta que desiste de hablar allí, en una situación puramente buñuelesca de no consecución.
La Virgen del matadero, el bruto entre los carnuzos y la conversación imposible
El padre del patrón, un vejete español, pone el contrapunto humorístico a esta tragedia, en la que, entre otras lindezas, el bruto destroza el cráneo del patrón o pega una paliza a su amante -que sangra por la cara a cuatro patas igual que Conchita en Ese oscuro objeto del deseo-.
El viejo roba caramelos aprovechando el asesinato de su hijo;
la pareja con los mismos nombres que en Los olvidados (Pedro y Meche);
Paloma come las uvas de la ira ante el espejo
Al final una oscura gallina intercambia su mirada con la pérfida dama que, aliada con la policía, desencadena la muerte. Aunque el filme no era del gusto de Buñuel, porque la productora mandó modificar el guión para hacerlo más convencional, es un sólido producto fílmico.
Paloma sangra en el suelo, entrega a su agresor y vislumbra la sinrazón
Doce años después, en el documental francés "Un cineasta de nuestro tiempo. Luis Buñuel", aparecen unas imágenes del derribo de su casa natal en Calanda, que nos recuerdan al derribo del edificio de este filme.
El derribo del filme y el derribo de la casa natal de Buñuel. Más información.